(Foto cortesía Heather Browne)
Un día como ayer, hace 10 años Jeff Buckley falleció... El artífice de aquellas canciones que hablaban, susurraban y gritaban por ti, había partido de este mundo. Ya no habría más aquella "voz en tu cabeza". Maldita sensación. Y es que aún perdura ese algo perturbador cuando vuelves a tomar el "Grace" entre tus manos y ponerle play para darte cuenta que no sólo es una de las obras maestras de los 90, sino un debut impecable, plagado de hermosas composiciones, donde el dolor, la angustia y la desesperanza son transmitidas con la misma fuerza con la que cantaba sobre el amor y la pasión. Contradicciones ornamentadas por melodías excelsas y un cantante que dejaba cuerpo y alma en cada rincón de su espectro vocal.
En cada segundo de sus aventuras musicales, Buckley exudaba una convicción increíble sobre lo que él ratificaba como las bases de su obra: blues, rock, folk, R&B, hard rock, pop, todo empaquetado en un breves y perfectas composiciones. La música era su todo absoluto. Cada pequeño sonido, cada pequeño quebranto de sus cuerdas vocales, cada vibrante estallido de su amplificador. Todo era algo fascinante e irrepetible.
(Foto cortesía MykReeve)
Y se le sigue echando de menos...
1 comentarios
Nunca habrá suficientes lágrimas...
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